Una propuesta, incluyendo dos sesiones, que permite interactuar con vuestro bebé antes de que nazca e involucrar a la pareja desde que comienza esta aventura. Dos sesiones para descubrir juntos los beneficios de la haptonomía: la comunicación a través del tacto y juegos emocionales. 

Si no habéis tenido tiempo de prepararos de forma completa, también podéis disfrutar del final del embarazo para crear un vínculo (hasta 40 semanas).

Hoy en día, gracias a la neurociencia y a las ciencias del comportamiento, sabemos que la afectividad tiene un lugar relevante desde el principio de la vida intrauterina. Al establecer un vínculo con vuestro bebé, él podrá desarrollar su seguridad básica y empezar a crear la historia de su nacimiento.

Desde que aparece en vuestro vientre, el bebé tiene una conciencia afectiva y emocional mucho mayor de lo que podemos imaginar.

 

La gestación conlleva muchos cambios internos y externos que pueden ser difíciles de aceptar por los futuros padres. Es fundamental aprender a crear un vínculo con el bebé para hablar con él, explicar y tranquilizarlo al contarle su historia. Ya forma parte de la historia de vuestra familia a pesar de ser minúsculo, y esta historia es importante para él también. La fuerza de este vínculo emocional le dotará de una seguridad básica increíble.

Los bebés tienen este impulso increíble y esta sabiduría de nacer. Conviene señalar que el parto es, ante todo, un fenómeno natural y emocional, que se vive juntos/as, en la más estricta intimidad y autenticidad. El tacto desempeña la función de relacionar los diferentes actores y tomar conciencia de la presencia del bebé. Favorece el desarrollo del vínculo emocional que da seguridad desde el principio.

 

*Las sesiones pueden empezar desde la 13^a semana hasta la 40 ^a semana.